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Roma - Geografía Física

Roma - Geografía Física

Con su peculiar aspecto de bota de tiro alto, Italia ha aportado al mundo tres milenios de historia, cultura y gastronomía sin parangón. Papas, artistas multidisciplinares y genios, poetas y escritores, amantes, polenta, políticos-empresarios y potentados forman parte de la iconología italiana pretérita y más actual. Es posible visitar vestigios romanos, contemplar innumerables muestras de arte renacentista, permanecer en diminutos pueblos de montaña del medievo, esquiar en los Alpes, adentrarse en los canales venecianos y deleitarse con innumerables iglesias
Italia es una república situada al sur de Europa. Sus fronteras son: Norte: Suiza y Austria. Noroeste: Francia. Sur: Mar Mediterráneo. Este: Eslovenia y Mar Adriático. Oeste: Mar Mediterráneo. También pertenecen a Italia algunas islas situadas en el Mar Mediterráneo como la isla de Elba, Sardinia y Sicilia y otras más pequeñas.
Dentro del territorio italiano se encuentran enclavados estados independientes como San Marino y el Vaticano.
Italia es una península cuyo territorio tiene una curiosa forma lo que hace que sea conocida en el mundo entero por su forma de bota. Se extiende a lo largo de 301.277 kilómetros cuadrados y tiene fronteras al oeste con Francia, al norte con Suiza y Austria y al este con Eslovenia.
La Península itálica se encuentra situada en el sureste de Europa, justo en el centro del Mediterráneo, hecho que facilitó el control que Roma ejerció en las tres riberas de su cuenca, la europea, la africana y la asiática Con una disposición longitudinal, la famosa bota limita al norte con los Alpes, al sur con el mar Jónico, al este con el mar Adriático y al oeste con el Tirreno
En Italia se encuentran dos cadenas montañosas de importancia: Los Alpes con alturas que se mantienen perpetuamente nevadas como el bello Mont Blanc de 4.810 metros, el Monte Rosa de 4.634 metros o el Monte Cervino con 4.478 metros.
Los Alpes pueden dividirse en tres secciones: la parte occidental con los Marítimos, Cottios y Graios; la parte central con los Peninos, Lepontinos y Réticos y la parte oriental con los Dolomíticos, Cárnicos y Julianos.
Los Apeninos son la otra gran cadena montañosa, que aunque no tienen picos de gran altura, se caracterizan por recorrer toda la Península a lo largo de 1.190 kilómetros, como si de una espina dorsal se tratara. Tiene como sistemas aledaños el Preapenino Tirreno y el Preapenino Adriático.
A los pies de los Alpes se encuentra la Llanura Piamontesa y los Grandes Lagos de origen glacial. El Lago Mayor de 212 kilómetros de diámetro es el más profundo, el de Como de 146 kilómetros y el de Garda, el mayor,con 370 kilómetros. La llanura más extensa es la Paduano-Véneta con 4.600 kilómetros cuadrados que se encuentra entre las dos grandes cadenas montañosas.
Las costas italianas son bañadas, al oeste por los Mares de Liguria, Cerdeña y Tirreno, al sur por el Jónico y por el Adriático al este.
El relieve presenta cuatro grandes unidades regionales: al N, un sector continental dominado por los Alpes; a sus pies, la llanura del Po; al S un sector peninsular articulado por los Apeninos; y finalmente las tierras insulares. El sistema alpino extiende por territorio italiano la casi totalidad de su vertiente meridional. En este gran conjunto montañoso destacan las formaciones calcáreas de los Dolomitas (Marmolada, 3.342 m de alt.) y en el sector cristalino, de formas más agrestes, algunas de las principales cumbres de todo el sistema alpino: Monte Rosa (4.634 m), Cervino (4.478 m).
Algunos pasos de montaña (Mont Cenis, Simplon, Brennero) facilitan la comunicación con las regiones vecinas. La región prealpina presenta largos y profundos valles, con numerosos lagos: Garda (370 km2), Mayor, Como, Iseo. Al S de los Alpes, entre éstos y los Apeninos, se extiende la llanura del Po (el río más largo del país, con 652 km de long.), fosa tectónica rellenada por los depósitos sedimentarios aportados por los ríos que descienden de los Apeninos y, especialmente, de los Alpes (Adigio, 410 km; Piave), y que avenan la llanura que se abre al mar Adriático por el litoral NE de Italia. El resto de llanuras italianas, aunque numerosas, son de escasa extensión, y se localizan preferentemente en el litoral tirrénico, formadas por importantes ríos (Arno, Tíber) o por llanuras costeras (Maremma, Agro Pontino).
La cadena de los Apeninos constituye la espina dorsal de la península italiana, y en ella se distinguen tres sectores: los Apeninos septentrionales, los de menor altura y de formas más suaves (monte Cimone, 2.163 m); los Apeninos centrales, también denominados Abruzos, que constituyen el techo de la cadena (Gran Sasso, 2.914 m), y presentan modelados de tipo cárstico; por último, los Apeninos meridionales, que tienen su punto culminante en el monte Pollino (2.271 m). A ambas vertientes de la cadena se extienden formaciones de colinas, denominadas Subapeninos o Antiapeninos, destacando las del reborde O, donde se elevan algunos volcanes (Vesubio, monte Amiata, Campos Flégreos). En el extremo S de la península Itálica, la isla de Sicilia es considerada una prolongación de los Apeninos (montes Nebrodi, Peloritani, Madonia), destacando el monte Etna, que con sus 3.345 m de alt. es el volcán activo más alto de Europa.
Las islas italianas presentan interesantes sistemas montañosos. Sicilia contiene, en realidad, una prolongación de los Apeninos, además de poseer el único volcán en activo de Europa, el Etna con 3.323 metros. Las erupciones más violentas y con funestas consecuencias para la población se produjeron en el año de 1669, destruyendo parte de Catania, y en 1928. Cerdeña no cuenta con ningún volcán, sin embargo tiene como característica el hecho de que sus elevaciones proceden de un antiguo macizo, el Tirrénido, que en su mayor parte se encuentra hundido. Los ríos de las islas son de carácter torrencial y sufren graves crecidas en invierno, mientras que en verano aparecen totalmente secos.

Fauna y flora:
Dependiendo del lugar al que se viaje de Italia, se descubrirán distintos tipos de vegetación y de especies animales en medio de una naturaleza rica en contrastes. Al norte del país, en medio de glaciares y cascadas, se encuentran especies alpinas; en las mesetas y zonas calcáreas, prevalece la flora y fauna mediterránea, mientras que en las grutas y costas se dan numerosas especies marítimas.
En los Alpes italianos hay especies que han conseguido adaptarse a las bajas temperaturas y a los vientos helados. Los árboles de coníferas, con el haya como principal exponente, y praderas de alta cota, son el entorno en el que se mueven animales como marmotas, armiños, liebres, águilas reales, faisanes de monte, francolines, ciervos, gamuzas y corzos. Sin embargo, la especie reina de este entorno es la cabra montés, que ha conseguido superar el peligro de extinción gracias al privilegiado medio que existe en la zona de los Alpes.
La zona central tiene como entorno a los Apeninos, así como a la fauna y flora típicamente mediterráneas. Los bosques de hayas, además de otorgar una gran belleza al paisaje, han dado cobijo a numerosas especies de animales maltratadas por el hombre a lo largo de la historia (el oso pardo marsicano, la gamuza de los Abruzos y el lobo han encontrado en este entorno un lugar idóneo para regenerar sus especies). En esta zona prevalecen, además, animales típicos como el lobo apenínico, el águila del Bonelli y el curioso pico negro. Por otro lado, el llamado Pinus Laricio, otorga al paisaje un bello contraste que recuerda al de los países nórdicos.
En las costas predominan, sobre todo, los cormoranes que eligen estas zonas para reunirse en grandes bandadas y pasar el invierno. En toda Italia, a excepción de las zonas montañosas, se encuentran mochuelos, águilas, azores, zorros, jabalíes y cabras salvajes, así como la típica vegetación mediterránea: olivos, naranjos, limoneros, vides, manzanos, albaricoques,perales y melocotoneros.
La isla de Cerdeña es asimismo montañosa (montes de Gennargentu), aunque cabe destacar la fosa tectónica de Campidano, entre Oristano y Cagliari. La climatología italiana, si bien tiene carácter mediterráneo, presenta notables variaciones regionales. En primer lugar, por efecto de su considerable extensión en latitud: medias anuales en Milán de 23 oC en julio y 1,5 oC en enero, mientras que en Palermo, dichas medias son de 26,2 y 11 oC. Por otro lado, debido a las condiciones orográficas: los Alpes, que actúan de barrera ante los vientos del N, registran las mayores precipitaciones (3.000 a 3.800 mm anuales); los Apeninos, por su parte, establecen una clara distinción entre sus dos vertientes: la tirrénica, que queda expuesta a las corrientes húmedas del O, y la vertiente adriática, a sotavento de dichas influencias (menos de 500 mm anuales en Apulia).

Rios de Italia:
Situación hidrográfica de la Italia continental.En la zona norte italiana encontramos la principal actividad hidrográfica del país.
El Po recoge gran parte de las aguas alpinas italianas y de la vertiente norte de los Apeninos Ligures y Tosco-Emilianos, creando una enorme depresión fluvial que ocupa una cuarta parte de la superficie italiana.Es el río más importante de Italia. Navegable desde Turín hasta su desembocadura en el mar Adriático, recibe una enorme cantidad de afluentes con los cuales conforma una red de vías fluviales interiores de aproximadamente 965 km; como dijimos en su mayoría descienden por la vertiente meridional de la cadena de los Alpes.Nace en el monte Monvisoy y desemboca en el Mar Adriático tras recorrer 652 kilómetros y haber drenado una cuenca de 75.000 Km2. Su caudal medio anual promedia los 1.540 m3/sg., lo que lo hace superior a otros importantes ríos europeos como el Elba, Sena, Tajo, Duero, Ebro y Loira.Es un río estratégico para la agricultura italiana y se encuentra actualmente sufriendo una dura sequía, que según expertos de la agencia italiana de protección del medio ambiente podría quedar reducido a 552 kilómetros en pocos años.
El caudal del Po ha bajado un 25% en los últimos 30 años a la vez que ha aumentado notablemente el empleo de sus aguas, un 73% de las aguas extraídas de su caudal son empleadas en la agricultura.
El delta del río cubre un cuarto del territorio italiano, produce el 40% del Producto Interno Bruto y cubre un 35% de la producción agrícola nacional. El Adigio, el segundo en extensión con 410 km de longitud, se inserta en Italia tras recorrer la provincia austriaca de Tirol. Recorre Italia hacia el este, al igual que el Po, hasta desembocar en el Adriático.Situación hidrográfica de la península itálica.
Los ríos que se encuentran en la península itálica y en las islas son más cortos y sus flujos resultan, por consiguiente, más pobres e irregulares. En general son poco profundos y proclives a las secarse durante el verano.En la vertiente centro-occidental, debido a la presencia de los Apeninos Centrales, se encuentran algunos ríos con vertientes un tanto mayores. El más destacado es el Arno que atraviesa Florencia y la Toscana, recorriendo algo así como 240 kilómetros a través de un valle agrícola intensamente explotado. Quien le sigue en importancia es el Tíber que atraviesa las regiones de Umbría y Lacio.Los demás ríos italianos de la península y las islas son de escasa importancia en comparación con los mencionados; no existe ninguna otra gran cuenca en este país montañoso y rodeado de mares, en el que el agua se precipita directamente al mar por torrentes y flujos estacionales más que por grandes ríos o depresiones fluviales de envergadura y caudal

El clima:
En su mayor parte es mediterráneo, sin embargo, presenta grandes contrastes de unas zonas a otras. En la región alpina a medida que se va subiendo en altura se va descendiendo en temperatura. La región padua-véneta tiene principalmente un clima suave pero seco, en la apenínica un clima suave pero con abundantes lluvias, la zona sur cuenta con temperaturas estables casi todo el año debido a la influencia del mar, mientras que en la zona adriática los inviernos son suaves y los veranos tórridos con temperaturas muy altas
Los tres volcanes activos, el Stromboli, en las islas Eolias, el Vesubio, cerca de Nápoles, y el Etna, en Sicilia, originan una gran actividad subterránea; el territorio italiano está a merced de los terremotos, que ocasionaron auténticas catástrofes en 1908 y 1980. Italia irradia belleza aunque, por desgracia, se desdibuja con la elevada contaminación, especialmente en las grandes ciudades y en la costa.
Dos milenios de ocupación humana, junto con la pasión de los lugareños por la caza, han provocado la extinción de numerosas especies animales que, en su día, fueron endémicas en Italia. Han sobrevivido osos pardos y linces y, en las regiones alpinas, perviven algunos lobos, marmotas, gamuzas y ciervos. En Cerdeña se pueden encontrar muflones, jabalíes y gatos salvajes, al igual que halcones y águilas reales que esquivan al vuelo los perdigones de los cazadores.
El clima de Italia varía de Norte a Sur y de las llanuras a las cumbres de las montañas. El largo y crudo invierno alpino trae la nieve en septiembre. Las regiones norteñas sufren inviernos glaciales y veranos calurosos, mientras que las condiciones se suavizan en el sur. El siroco, viento africano cálido y húmedo que afecta a las regiones del sur de Roma, origina al menos dos semanas de sofocante calor en el estío.

El término “Campania” significa llanura. Es una región de Italia meridional. Está bañada por el mar Tirreno y limita al Norte con el Lazio y el Molise, y al Este con la Puglia y la Basilicita. Está compuesta por cinco provincias: Avellino, Benevento, Caserta, Nápoles y Salerno. La capital de la región es Nápoles. En esta última se encuentra el famoso Castel Nuovo, Palacio Real, Il Duomo, Puerta Capuana, Palacio Real de Capodimonte, Castel San Elmo, Cartuja de San Martino y el Teatro San Carlos, entre otros. En Avellino: Il Duomo, el Museo Irpino, Palacio de la Aduana, Palacio Calacciolo y el Santuario di Montevergine.
En la ciudad de Benevento encontramos el Arco di Traiano, Teatro Romano, Iglesia Santa Sofía y el Museo del Sannio. Caserta es la provincia más prestigiosa por su palacio Real, Il Duomo y el Monumento al Vamvitelli. La provincia de Salerno es majestuosa por su belleza natural, donde podemos ver Il Duomo y la Biblioteca Provincial. La Campania tiene una extensión de 13.500 km2. Es recorrida en gran parte por los Apeninos campanos y por los macizos del Cilento y del Maltese.

La Emilia-Romaña (Emilia-Romagna, en italiano) es una región administrativa del norte de Italia. Limita al este con el mar Adriático, al norte con el Véneto y con Lombardía, al oeste con Piamonte y Liguria, al sur con la Toscana, Marcas y con la República de San Marino. Con 4.030.000 habitantes en 22.123 km² (2003) es una región densamente poblada (especialmente en la llanura central).
Está compuesta por dos regiones históricas, Emilia, formada por las provincias de Ferrara, Piacenza, Parma, Reggio nell’Emilia, Módena y parte de la provincia de Bolonia, incluyendo su capital Bolonia; un centro de importancia histórica y cultural de relevancia nacional y la Romaña, formada por las provincias de Rávena, Rímini, Forlì-Cesena y la parte oriental de la provincia de Bolonia. La Romaña histórica comprende además territorios situados administrativamente en las regiones de Las Marcas y la Toscana.
La mayoría de las ciudades fueron fundadas por los romanos siguiendo el transcurso de la Vía Emilia, nombre al que se debe la actual denominación de Emilia.
La región de Emilia-Romagna está ubicada en la parte nororiental de Italia y, gracias a su favorable ubicación geográfica, une la parte norte del país a las partes central y meridional del país. Bolonia, el pueblo más importante de la región, La unidad geográfica de la región se encierra en una forma triangular, cuyos lados están formados por el curso del río Po, al norte; por el Mar Adriático, al este; por la cumbre apenínica, al suroeste. Ya durante la dominación romana, la región augusta, la Octavia Regio, tenía una forma casi equivalente a la actual.
Es la región del Gran Río, del Parmigianino, de los pórticos y de los castillos diseminados en las colinas: tierra de nieblas, chopos y bicicletas, inmortalizada por Bernardo Bertolucci en la inolvidable película Novecento; de Parma a Imola, no hay pueblo que no tenga por lo menos un tramo de calle sombreado en verano y reparado de inverno.
Los pórticos triunfan en Bologna, con más de 38 kilómetros de calles porticadas, donde en un día de lluvia es posible recorrer todo el casco viejo sin necesidad de un paraguas. El corazón de la ciudad es la plaza Mayor donde se asoman con su belleza el Palacio del Podestà, el Palacio de los Banchi, el Palacio de los Notarios, el Ayuntamiento y la imponente Basílica de S. Petronio: todos miran a la magnífica estatua de bronce de la divinidad que domina la fuente del Neptuno, del Giambologna, uno de los símbolos de la ciudad. La Plaza Mayor es la plaza de la gente, llena de encanto y de emociones, el lugar de los encuentros y de los paseos; bajo el elegante pórtico del Pavaglione se encuentra la zona de compras de la ciudad: 400 metros de salones atestados de joyerías, tiendas y curiosidades.
La tradición astronómica de Emilia es excepcional, entre los ñoquis fritos y la piadina, la coppa y el culatello, pero Bologna triunfa con las tagliatelle a la bolognese, los tortelines, las lasañas y los exquisitos pinchos como el pan rosetta con mortadella apenas cortada; sin olvidar el vino Sangiovese o el vinagre balsámico de Modena. Parma es una ciudad refinada y culta, con una tradición de libreros y estampadores de arte; en efecto, la Biblioteca Palatina, que está en el interior del Palacio de la Pilotta, cuenta con más de 700.000 tomos, entre los cuales figuran espléndidos códigos artísticos, manuscritos e incunables hebreos rarísimos. La atmósfera poética de Parma continua en el fascinante Parque Ducal, rico de edificios, y en el Teatro Regio, obra de arte neoclásica y uno de los más importantes teatros líricos italianos. Pero el símbolo de la ciudad es la estupenda Catedral románica cuyas formas, decoraciones y esculturas narran, a través de la piedra esculpida, la historia de la ciudad. La provincia de Parma está llena de parroquias, iglesias, abadías, y castillos de época medieval, pero también de peñones y pueblos fortificados prontos para detener al enemigo o para acoger a las damas y los caballeros ilustres. Roccabianca parece salida de un libro de cuentos: su plaza espectacular tiene como panorama de fondo la fachada de un castillo que fue el regalo de amor de un noble condotiero a su amada Bianca Pellegrini.
Una historia romántica que continúa en el castillo de Torrechiara encaramado en una colina y que se reconoce desde lejos por sus formas perfectas: es una fortaleza medieval con todas las de la ley, amenazadora y severa. Aquí ocurrían los encuentros secretos entre los dos amantes: la Estancia de Oro recuerda su historia de amor a través de los frescos del techo y los artesones de las paredes decoradas con un entrelazado de corazones e iniciales.
El castillo está situado cerca de Langhirano donde las altas y estrechas ventanas de los edificios y las amplias terrazas son elementos funcionales para la producción del jamón serrano de Parma, famoso en todo el mundo, así como el Parmigiano Reggiano que tiene su reinado en la localidad de Soragna. Reggio Emilia es una ciudad de pórticos y campanarios embellecida por numerosas obras contemporáneas; en el claustro del siglo XII del convento de S. Domingo se encuentra Less than, obra del escultor Robert Morris: una figura grande de bronce, sin cabeza, que lleva en la espalda una pesada ánfora.
Otras dos ciudades interesantes son Ferrara con su extraordinario palacio de los Diamantes, con sus elegantes sillares en punta, que acoge la importante Pinacoteca Nacional, y Ravenna, de importancia mundial por sus mosaicos: estos tesoros de la humanidad están custodiados en el complejo de San Vitale donde las estupendas figuras bizantinas no dan tregua a los ojos. Pero es el Po, río rebosante de vida, atestado en cualquier estación por las canoas y barcos turísticos, junto con los pueblos que se asoman en sus orillas, quienes representan la parte más auténtica y vivaz de esta región, hecha de atmósferas especiales, donde también la niebla, en invierno, añade al paisaje un encanto misterioso y donde cada lugar está impregnado de la música y de los recuerdos de Giuseppe Verdi, nacido en estos lugares.
También Brescello, el pueblo de don Camillo y Peppone, recuerda aún las románticas batallas entre el alcalde y el párroco, amados en todo el mundo. Piacenza es una bella ciudad, reservada, llena de palacios de fachadas austeras, pero ricos en su interior, en un esplendor de jardines y patios, estatuas y escalinatas, pero siempre con un lujo sobrio y discreto: en el palacio Farnese uno se queda encantado ante la Virgen que adora al Niño de Sandro Botticelli. Los apasionados de motores quedarán fascinados, en cambio, por la galería de la Ferrari en Maranello. Quienes amen a Federico Fellini, por último, no podrán dejar de ir a Rimini, la “reina de las playas”, atestadas de “vitelloni”, donde todo nos habla del gran Maestro.
Y ya entonces había cobrado vida un complejo homogéneo de ciudad, que encontró su eje de desarrollo a lo largo de la via Emilia, todavía hoy columna vertebral de la población. Con la caída del imperio, sin embargo, esta unidad viene a menos; la región sufrió continuas desmembraciones (invasiones bárbaras, dominación bizantina, etc.). En el siglo XIII y el XIV el fenómeno de las Señorías dió vida a una situación de gran movilidad que, en el alternarse de los acontecimientos históricos, duró hasta el 1859 cuando la denominación “Emilia” alcanzó un significado político-administrativo. Un intento anterior de reunificación tuvo lugar en el 1797, con la República Cisalpina, que comprendía la ciudad de Ferrara, Reggio Emilia, Modena y Bolonia y que se enorgulleció del nacimiento de la que más tarde se convertiría en la bandera italiana. La actual Emilia-Romania, así pués, originada por la Unità, es también el resultado de singularidades que se han ido amalgamando progresivamente.
Bolonia fue en el pasado una ciudad de la que sobresalían cientos de torres, símbolo de poder para las familias aristocráticas. Hoy sólo quedan unas pocas y las más simbólicas, a una manzana de la plaza Maggiore. Las Dos Torres, de principios del siglo XII, se encuentran pegadas una a la otra: la Garisenda, la más pequeña e inclinada y la Asinelli, desde cuya cima, a 97 metros, tendrás una de las mejores vistas de la ciudad En la base de esta última, entra en su tienda, con artesanía de la región. Encontrarás tradición mezclada con diseño en forma de joyas, cerámica o hierro.

La región de la Toscana está ubicada en el centro de Italia, limita con la región de Lacio al sur, Umbría al este, Emilia-Romaña y Liguria al norte, y el Mar Tirreno al oeste.Es una de las 20 regiones de Italia. Su capital es Florencia, tiene una superficie de 22.990 km²Como es el paisaje: La región de la Toscana está formada por montañas, colinas, cuencas interiores y bajas llanuras costeras. Posee diversos tipos de suelo; además de extensas zonas de bosque, las más grandes de toda Italia; y numerosos cursos de agua procedentes de la vertiente Oeste de la cadena de los Apeninos.
En los Apeninos toscanos, cuya máxima altura es 2.165 m. en el Monte Cimone, nacen numerosos ríos flanqueados por los verdes valles que atraviesan; como el Val Tiberina donde nace el Tiber o el Casentino donde pasa el Río Arno.
En la costa el paisaje se presenta completamente llano. Los fondos marinos son relativamente planos y poco profundos, lo que explica la amplitud de la llanura costera, que recibe los aluviones de los numerosos ríos. El archipiélago toscano y el Monte Argentario constituyen la prolongación en el mar de los últimos accidentes producidos por el plegamiento de los Apeninos.
Localización Geográfica: la palabra Toscana aparece por primera vez en el siglo X, derivada de Tuscia, nombre con el que se designó, a partir del silgo III, a la antigua Etruria, territorio de los Etruscos; comprendido entre el Arno y el Tiber.
La Toscana está claramente delimitada al Nordeste por el arco montañoso de los Apeninos, que atraviesan el país desde Livorno en dirección al Adriático.
Religión: El país que acoge el Estado Pontificio no podía dejar de ser católico y lo es en un porcentaje tan alto como de un 99,5 %, es decir, sólo medio italiano de cada cien, no profesa esta religión.
Florencia: (en italiano, Firenze) es una ciudad en el centro de la región Toscana, en el noroeste de Italia, sobre el río Arno, con una población de 352.940 habitantes y un área metropolitana de más de 600.000. Florencia es la capital de la región de Toscana y de la provincia de Florencia y por un breve período (1865-1871) fue la capital del Reino de Italia. Florencia fue regida durante un largo período (1434-1494, 1512-1527, 1530-1737) por la familia Médicis.
El 4 de noviembre de 1966, como consecuencia de las lluvias torrenciales, sufrió la más fuerte riada de su historia cuando el Arno alcanzó 4.500 m3/seg. anegando el casco histórico. En algunos puntos como la Plaza de Santa Cruz el agua superó los 5 metros de altura. Los daños en el patrimonio histórico (Ponte Vecchio, Duomo, Signoria) fueron cuantiosos.
Pisa tiene una historia antiquísima. Empezó siendo un asentamiento etrusco, convirtiéndose posteriormente en una ciudad romana, alcanzó grandes riquezas en la Edad Media y ha acabado siendo una moderna ciudad con mucho que ofrecer al viajero actual. Además de las visitas históricas, las playas están a tan solo 10 kilómetros de distancia.
Situada a la orilla del río Arno en la bella Toscana, esta ciudad cuenta con un buen número de lugares interesantes que visitar, como la Plaza de los Milagros (Campo dei Miracoli), de la que se dice que es una de las plazas más bellas del mundo. Posee una enorme extensión de césped, rodeada por edificios que representan la existencia humana: la catedral (la salud), la torre inclinada (la razón), el baptisterio (el bautismo) y el cementerio (la muerte).
La construcción de la catedral comenzó en el año 1064. El edificio es un bello ejemplo de la arquitectura románico-pisana y su particular aspecto se debe a la alternancia de bandas de mármol verde y crema. El Papa Gelasio II la consagró en 1118. Sus cinco naves contienen un buen número de obras de arte auténticamente impagables.

Lombardía se sitúa en el noroeste de Italia y es una de pocas regiones sin mar de la península.Lombardía es una de las muchas y fantásticas regiones italianas en las que cada rincón es interesante y que con sólo 6 días no da para ver todo lo que nos gustaría.
Lombardía tiene una superficie de 23.859 km2 y la mayor parte de su territorio son montañas y colinas. Muchos de sus pueblos están en lo alto de las colinas y con unos paisajes increíbles.
Esta es una región compleja y multiforme. Y es complicado hacer una introducción en forma de resumen para adelantar lo que vimos y vivimos. Nosotros decidimos recorrer la zona de la Franciacorta (entre Brescia y Bérgamo, entre los lagos de Iseo y Garda), una parte de la región que nos interesaba especialmente por su enogastronomía. Empezamos a oír sobre ella cuando hace unos años descubrimos un vino delicioso en una enoteca de Bérgamo. El vino se llamaba Terre della Franciacorta y decidimos descubrir más cosas de esta variada región e intentar amar lo que esta tierra puede ofrecernos. Además como tierra rica en buenos vinos, quesos y embutidos excepcionales, las tiendas de delicatessen están presentes en todos los pueblos y rincones de Lombardía.
En ellas podemos encontrar un gran surtido de elaboraciones y sabores. Aunque somos países vecinos y mediterráneos, los sabores de Lombardía nos sorprenden por su variedad y calidad.
es la region mas poblada de Italia. Lombardia: grandes familias del renacimiento italiano, gracias a las cuales, y a pesar de la extrema crueldad de que hicieron gala, dejaron parte de su legado artistas de la talla de Leonardo da Vinci, Caravaggio, Bellini o Bramante. Lombardía linda con los Alpes, y alberga por ello uno de los paisajes más espectaculares del país. Entre otras muchas razones, es famosa por sus lagos, entre los que destaca por su tamaño el de Garda, el mayor en extensión de todo el país. Su proximidad con otras naciones de centroeuropa y su historia fuertemente ligada al continente la han convertido, probablemente, en la región menos “italiana”Lombardía ocupa una superficie de 23.859 km² y es la región con la mayor población de Italia ya que cuenta con 9.122.000 de habitantes. La capital de la región es Milán que además es la segunda ciudad de Italia por número de habitantes.
El resto de las capitales de provincia de esta región son: Bergamo, Brescia, Como, Cremona, Lecco, Lodi, Mantua, Pavia, Sondrio y Varese. El territorio de la región está constituido por llanuras en su 47% y por montañas en su 40%.En la zona al sur encontramos el río Po con sus importantes afluentes: el Adda, el Ticino, el Oglio y el Mincio.
Los picos más importantes del territorio son los del Gruppo del Bernini que alcanzan casi 4000 metros de altura. En la franja prealpina se encuentran un gran número de lagos. Los más importantes son: el Lago Maggiore, el Lago de Lugano, il Lago de Como, il Lago d’Iseo, el Lago d’Idro y el Lago de Garda. Desde los Alpes, hasta Suiza, en la neblina de la llanura del Po, esta la region de Lombardia es una de las regiones con mas poblacion de Italia. El desarrollo economico ha hecho crecer los centros urbanos y ha hecho de la region, el corazon industrial y financiero de la nacion italiana.
Para ver… La region ofrece escenarios naturales muy interesantes: desde el Parque Nacional del Stelvio, que contiene, bosques, asi como lugares particulares y caracteristicos, hay lagos maravillosos, como el Lago Maggiore, El Lago de Como y el Lago de Garda, en donde los grandes señores se hacen casas grandes, y jardines impresionantes, que algunas veces se pueden visitar.
Lombardia tiene el más extenso sistema fluvial de toda Italia con sus diez largos ríos y muchos torrentes. Uno de los ríos más grande es el Po, que tiene unos 260 Kilometros de largo y es el río más importante que cruza toda Lombardia. Otro río famoso es el Ticino, que marca el borde occidental de la región, que es el área protegida más grande de Lombardia.
Lombardia no es rica solamente en ríos: se encuentran además muchos parques y áreas de recreación. Cerca del río Oglio hay el famoso Parque Natural Adamello con su maravillosa naturaleza y sus cascadas de los molineros
Históricamente, el nombre de Longobardia lo emplearon los bizantinos para denominar el territorio ocupado por los lombardos. En la época romana, la región carecía de fisonomía propia, de manera que en la división territorial llevada a cabo por Augusto la parte occidental se incorporó a la Transpadana y la oriental a la Venetia. Invadida primero por los hérulos de Odoacro y más tarde por los godos de Teodorico, L. sirvió de escenario a la calamitosa guerra greco-gótica (535-553).
El Gobierno de Bizancio fue incapaz de resolver los problemas de la región, más bien los agravó, facilitando de esta manera su rápida conquista por parte de los lombardos (568), que establecieron en Pavía la capital de la monarquía. A raíz de la dominación por Carlomagno y de la derrota de los lombardos (774), L. se fraccionó en una serie de ducados, que más tarde se convirtieron en condados francos y finalmente, en el 888, en los condados de Milán, Como, Pavía, Seprio, Bérgamo, Lodi, Cremona, Brescia, Mantua, Piacenza, Parma, Reggio y Módena, que constituyeron la marca de L.
Más adelante, al poder condal sustituyó el de los obispos, con ayuda del emperador Otón I (v.), que buscaba en el clero un apoyo contra el feudalismo laico. Este sector trató entonces de recuperar su antiguo predominio, con la reconstrucción de un reino de Italia, independiente del Imperio, bajo el marqués Arduino de Ivrea. Pero los obispos de las ciudades lombardas prestaron su apoyo al Emperador. La facción laica reemprendió la lucha contra el poderosísimo arzobispo de Milán Ariberto de Intimiano. Las diferencias entre grandes señores y pequeños vasallos se resolvió en un cambio de alianzas; el partido clerical unido a la alta nobleza y con él apoyo de la burguesía fue vencido por la baja nobleza, agrupada en la Liga de la Motta (1036).
Requerido por uno y otro partido, el emperador Conrado II se presentó en L., poniéndose de parte de los subvasallos, que asediaron a Ariberto en Milán, sin éxito. Recurrió entonces a la astucia y estableció en la Constitutio de feudos (1037) la hereditariedad de los feudos menores, lo cual significó un cambio en la estructura del mundo feudal lombardo.

Piamonte (en italiano Piemonte) es una de las veinte regiones de Italia, situada al noroeste del país. Capital: Turín
Se divide en ocho provincias: Alessandria, Asti, Biella, Cuneo, Novara, Turín, Verbano-Cusio-Ossola y Vercelli. Región italiana, situada en el extremo occidental de la llanura del Po, al pie de la cordillera alpina, de la cual constituye su piedemonte, que ha dado nombre a la región. Su superficie es de 25.399 Kmz y su población se eleva a 4.433.485 hab. (1970). Turín (v.), con 1.190.688 hab., es la capital regional. Otras ciudades importantes son: Novara (100.795 hab.), Alessandria (100.649), etc.
La región se caracteriza desde el punto de vista físico por su continentalidad, a consecuencia de que está enmarcada por el arco occidental alpino que forma frontera con Francia y Suiza, y por la cadena ligur que la aísla del Mediterráneo. El relieve es abrupto, especialmente en la frontera con Francia, donde se encuentran algunas de las mayores alturas de los Alpes, sin que en ningún momento la línea de cumbres descienda por debajo de los 3.000 m.
La mitad occidental de la región no es más que un desarrollo de ladera que termina bruscamente en la llanura del Po. Únicamente cabedestacar algunas pequeñas alineaciones montañosas orientadas de O a E, como las «colinas del Po» o las de Monferrato, que accidentan la llanura.
Piamonte. ha desempeñado siempre un papel muy importante como zona de paso hacia las regiones de Europa occidental. Por otra parte, la configuración topográfica de la región hace que la red hidrográfica confluya en un solo punto, dando nacimiento al Po propiamente dicho y determinando el emplazamiento de Turín, que se convierte así en cabecera de una red de comunicaciones trasalpinas. Junto a ésta función de tránsito, la región ha tenido una economía tradicional ganadera basada en la trashumancia, así como comercial y artesana. P. fue la primera región sobre la que se fraguó la unidad italiana a mediados del s. XIX, adquiriendo así una cierta primacía sobre el resto de la nación y atrayendo sobre ella acciones políticas que favorecieron el desarrollo industrial de la misma. Es la segunda región económica de Italia, productora de vinos, con una notable industria textil y automovilística.
La región de Piamonte, con más de trescientos millones de años, es lo suficientemente antigua como para narrar una larga historia de guerras, trabajo, tradiciones y cultura; pero también es lo suficientemente joven como para manifestar energía y vitalidad productiva. De hecho, en esta tierra de abundantes recursos humanos y paisajísticos, la gente ha creado y producido con gran habilidad empresas y actividades artesanales en el ámbito internacional. Piamonte siempre se ha considerado la región alpina por excelencia; su propio nombre, “a los pies del monte”, evoca inmediatamente un escenario sugerente en el que sobresalen cimas perennemente cubiertas de nieve y macizos que se encuentran entre los más altos de Europa como el Monte Rosa, mencionado en su día por Leonardo, y el Monviso, el lugar donde nace el río Po.
El territorio de Piamonte se divide de forma homogénea entre zonas de montaña, de colinas y de llanos. Dentro de sus confines se concentran 1.206 de los 8.101 municipios italianos; de los cuales, más de 600 cuentan con menos de 1.000 habitantes. Con una superficie de 25.399 Kilómetros subdivididos en 8 provincias (Turín, Alessandria, Asti, Biella, Cuneo, Novara, Vercelli y Verbania), Piamonte es la segunda región más grande de Italia después de Sicilia. Limita al oeste con Francia, al norte con Suiza, al noroeste con el Valle de Aosta, al este con Lombardía, al sureste con Emilia Romagna y al sur con Liguria. El total de la población residente es de aproximadamente 5.330.000 habitantes, segun datos del 2006.

La Region Puglia es la más sur oriental de Italia, de hecho el capo de Otranto (en Salento) dista alrededor 80 km de la costa de Albanìa. Esta regiòn està formada por seis provincias, Bari, es además capital de la regiòn, Foggia, Brindisi, Taranto, Lecce y otras tres ciudades que desde hace poco tiempo constituyen una provincia ùnica: Barletta, Andria y Trani (BAT).
EL territorio que està considerado come el menos montuoso de Italia, está formado prevalentemente por colinas y llanuras ,se encuentran pocas zonas montuosas, entre ellas “il Gargano”, “la Daunia” “le murge” ,
La zona de llanura de dicha regiòn se extiende entre “il tavoliere delle Puglie”,” la terra di Bari” e” la pianura Salentina”, mientras la zona de colina està representada por “le alte Murge” que tiene como lìmite inferior 350 metros.
La puglia que geográficamente representa el taco de Italia es rodeada del mar adriático y del mar jónico, esta posición estratégica entre los mares del mediterráneo permitieron el desembarco de millones de albaneses, de africanos y de naciones vecinas que transformaron esta región en una región multiétnica. He aqui otra de las antiquisimas civilizaciones: la mesapica, de origen autoctono, y la griega venida a traves del mar: dos civilizaciones que, despues de haber combatido entre si fueron absorbidas por la romana. Algunas de sus ilustres y ricas ciudades desaparecieron a traves de los siglos, como Sibari y Metaponto, otras, como Taranto (Tarento), sobrevivieron. Tarento tenia en la epoca romana tantos habitantes como hoy. Otras surgieron poco a poco a lo largo de los siglos. Roma trazo hasta Brindisi, su gran carretera enfocada a Oriente: la Appia. En Venosa, aspera tierra interior, nacio Horacio y, en Brindisi, murio otro gran poeta romano: Virgilio.

La séptima isla europea por dimensiones, la principal isla de Italia y la mayor del Mar Mediterráneo. En ella se encuentran, además, varias islas más pequeñas: las islas Eóleas, las Egades, las Pelage y las de Pantelleria. Debe su nombre a los antiguos griegos, que la llamaron Sikelia, porque la tribu nativa eran llamados Sikels Separada de la punta meridional de la Península Itálica por el estrecho de Messina, Sicilia está bañada al Norte por el mar Tirreno; al Este, por el mar Jónico; y al Sur, por el Mediterráneo.
A su alrededor, y a poca distancia de sus costas, surgen numerosas pequeñas islas. Las Eolias se hallan cerca de su punta oeste, a la altura de Trápani, y las Égates, al Suroeste. Más cercanas a la costa tunecina se sitúan Pantellería y Lampedusa.
A la Sicilia marítima que alterna acantilados, playas de arena y vegetación exuberante, se opone el paisaje austero del interior, compuesto de colinas y altiplanos áridos. La mayor de las islas del Mediterráneo, Sicilia, es una tierra con características propias muy acusadas y personalidad universal
La isla de Sicilia se halla al sudoeste de la península itálica, de la que la separa el estrecho de Messina. De forma triangular, tiene una superficie de 25.460 km2, lo que la hace ser la isla más extensa del Mediterráneo. Baña su costa septentrional el mar Tirreno, el mar Jónico la oriental, y el estrecho de Sicilia discurre entre la orilla sudoccidental de la isla y el continente africano.
Geografía física Sicilia es montañosa. Su actividad sísmica y volcánica es una de las más intensas de Europa. El monte Etna, volcán activo de 3.261 m de altura, constituye el punto más alto de la isla
El clima es subtropical y mediterráneo. En la costa las heladas son casi desconocidas, y las lluvias oscilan alrededor de los 400 y 600 mm al año. Los veranos son casi totalmente secos. En las montañas del interior las precipitaciones varían entre los 1.200 y los 1.400 mm y pueden registrarse heladas y nieves. Milenios de civilización han reducido al mínimo los bosques y la vegetación natural de la isla, cuyo territorio, intensamente aprovechado para el cultivo y el pastoreo de ganado, corre en algunos puntos peligro de desertización. Al Oeste, el volcán Etna (3.350 m), todavía en actividad, ostenta sus peladas laderas mientras que el Stromboli, homónimo a la isla que lo alberga, escupe rocas sin interrupción.
Sicilia goza de un clima mediterráneo caracterizado por un largo período estival, cálido y seco, momento en el que sopla el siroco. En invierno la temperatura media ronda los 10ºC. Las aguas sicilianas hospedan una importante población de atunes y de peces espada. Anualmente, entre el 10 de mayo y el 10 de junio, los pescadores de las islas Égates perpetúan la sangrienta tradición de la mattanza, cuyas escenas inmortalizó Roberto Rossellini en su película Stromboli. Bancos enteros de atunes atrapados en las redes son arponeados uno tras otro.
La fisonomía de la región ha sido intensamente modificada por la mano del hombre. A lo largo de las costas, los olivares y las plantaciones de almendros bordean inmensos huertos de cítricos cultivados en bancales gracias al sistema de irrigación construido por los árabes. En el interior de la región, seco y pedregoso, dominan los campos de trigo y de habas que dan paso, aquí y allá, a cactus y arbustos raquíticos.
Los amantes de la naturaleza pueden visitar la Reserva Natural del Cíngaro, ubicada en el golfo de Castellammare en el oeste de la isla, y el Parque Natural de la Madonia, situado entre Palermo y Cefalú. Diversas especies de aves habitan en la Reserva de Vendicari.
Palermo es la capital de Sicilia y uno de los destinos más buscados por los turistas. Cuenta con monumentos de gran importancia como la Catedral, con dos torres unidas al campanario por dos puentes que le confieren un aspecto realmente original.
En el interior destacan las esculturas de Gagini, la urna de plata que guarda los restos de Santa Rosalía y la cripta del siglo XII. El Palacio dei Normanni tiene reminiscencias árabes y normandas. Se pueden ver frescos de Velázquez en la Sala de Hércules y estupendos mosaicos en la cúpula bizantina. Destacan también San Giovanni degli Eremeti, de estilo normando, el campanario y los mosaicos de la Iglesia de la Martorana, el Palacio Abatellis, sede de la Galería Regional de Sicilia, los estupendos estucos del Oratorio de San Lorenzo y del Oratorio del Rosario di San Domenico, Zisa, el antiguo palacio de descanso de los reyes normando y la colección etrusca, las metopas selinuntinas del siglo V y las esculturas siliciotas del Museo Arqueológico. Como curiosidad se debe visitar el Museo Internacional de las Marionetas. Una ciudad Siracusa Arquímedes, uno de los más renombrados matemáticos e inventores de la historia, nació en Siracusa en el año 287 a.C. y pasó allí la mayor parte de su vida. Durante la invasión romana inventó diversos dispositivos que fueron utilizados para la defensa de la ciudad.
Píndaro, el gran poeta lírico nacido cerca de Tebas, se radicó durante dos años en Sicilia, invitado por el tirano Hierón I.
Platón, por intermedio de Arquitas de Tarento, llegó a la corte del rey Dionisio I de Siracusa, con el fin de llevar a la práctica sus ideas políticas. El rey, más dado al capricho que a la razón, terminó vendiendo al ateniense como esclavo. Por suerte, Platón fue adquirido por un filósofo socrático de Cirene que le devolvió inmediatamente la libertad. Cuando Platón quiso devolverle el dinero, Anníceris (así se llamaba el cirenaico), se negó a aceptarlo y Platón utilizó esa suma para comprar los terrenos en los que fundaría su Academia. Muchos años después, volvió Platón a Siracusa con el mismo propósito y fracasó.

La región de la Toscana está ubicada en el centro de Italia, limita con la región de Lacio al sur, Umbría al este, Emilia-Romaña y Liguria al norte, y el Mar Tirreno al oeste.Es una de las 20 regiones de Italia. Su capital es Florencia, tiene una superficie de 22.990 km²Como es el paisaje: La región de la Toscana está formada por montañas, colinas, cuencas interiores y bajas llanuras costeras. Posee diversos tipos de suelo; además de extensas zonas de bosque, las más grandes de toda Italia; y numerosos cursos de agua procedentes de la vertiente Oeste de la cadena de los Apeninos.
En los Apeninos toscanos, cuya máxima altura es 2.165 m. en el Monte Cimone, nacen numerosos ríos flanqueados por los verdes valles que atraviesan; como el Val Tiberina donde nace el Tiber o el Casentino donde pasa el Río Arno.
En la costa el paisaje se presenta completamente llano. Los fondos marinos son relativamente planos y poco profundos, lo que explica la amplitud de la llanura costera, que recibe los aluviones de los numerosos ríos. El archipiélago toscano y el Monte Argentario constituyen la prolongación en el mar de los últimos accidentes producidos por el plegamiento de los Apeninos.
Localización Geográfica: la palabra Toscana aparece por primera vez en el siglo X, derivada de Tuscia, nombre con el que se designó, a partir del silgo III, a la antigua Etruria, territorio de los Etruscos; comprendido entre el Arno y el Tiber.
La Toscana está claramente delimitada al Nordeste por el arco montañoso de los Apeninos, que atraviesan el país desde Livorno en dirección al Adriático.
Religión: El país que acoge el Estado Pontificio no podía dejar de ser católico y lo es en un porcentaje tan alto como de un 99,5 %, es decir, sólo medio italiano de cada cien, no profesa esta religión.
Florencia: (en italiano, Firenze) es una ciudad en el centro de la región Toscana, en el noroeste de Italia, sobre el río Arno, con una población de 352.940 habitantes y un área metropolitana de más de 600.000. Florencia es la capital de la región de Toscana y de la provincia de Florencia y por un breve período (1865-1871) fue la capital del Reino de Italia. Florencia fue regida durante un largo período (1434-1494, 1512-1527, 1530-1737) por la familia Médicis.
El 4 de noviembre de 1966, como consecuencia de las lluvias torrenciales, sufrió la más fuerte riada de su historia cuando el Arno alcanzó 4.500 m3/seg. anegando el casco histórico. En algunos puntos como la Plaza de Santa Cruz el agua superó los 5 metros de altura. Los daños en el patrimonio histórico (Ponte Vecchio, Duomo, Signoria) fueron cuantiosos.
Pisa tiene una historia antiquísima. Empezó siendo un asentamiento etrusco, convirtiéndose posteriormente en una ciudad romana, alcanzó grandes riquezas en la Edad Media y ha acabado siendo una moderna ciudad con mucho que ofrecer al viajero actual. Además de las visitas históricas, las playas están a tan solo 10 kilómetros de distancia.
Situada a la orilla del río Arno en la bella Toscana, esta ciudad cuenta con un buen número de lugares interesantes que visitar, como la Plaza de los Milagros (Campo dei Miracoli), de la que se dice que es una de las plazas más bellas del mundo. Posee una enorme extensión de césped, rodeada por edificios que representan la existencia humana: la catedral (la salud), la torre inclinada (la razón), el baptisterio (el bautismo) y el cementerio (la muerte).
La construcción de la catedral comenzó en el año 1064. El edificio es un bello ejemplo de la arquitectura románico-pisana y su particular aspecto se debe a la alternancia de bandas de mármol verde y crema. El Papa Gelasio II la consagró en 1118. Sus cinco naves contienen un buen número de obras de arte auténticamente impagables.

El Véneto es una región del nordeste de Italia con una superficie de 2 millones de hectáreas y una población de 4 millones de habitantes, cuyo eje es la legendaria Venecia. Hasta principios de los 60 la región mostraba un importante retraso, con un per capita inferior al promedio italiano y una población de bajo nivel educativo dedicada a una agricultura pobre. Su desarrollo industrial era modesto y ligado a dos polos productivos: uno, textil-lanero, que se remonta al siglo XVIII y otro, químico-mecánico, surgido durante el periodo fascista.
Región del nordeste de Italia, quien dice Véneto piensa en Venecia, su capital: la Piazza San Marcos, la gran laguna, las góndolas en el Canal Grande, el puente de los Suspiros, el Carnaval desenfrenado, las arquitecturas grandiosas, las obras maestras del arte, los palacios suntuosos, la magia de las “calles”, el Festival Internacional del Cine, la Bienal del Arte, el Teatro La Fenice, las universidades prestigiosas.
Pero el Véneto no es solamente Venecia y su naturaleza no es sólo el mar. La montaña véneta exhibe escenarios de insólita belleza. Los Alpes dolomíticos vistos desde Cortina d’Ampezzo, famosa localidad de veraneo en la provincia de Belluno, son un espectáculo grandioso.
Es grande también la atracción de las villas Paladianas, llamadas así por el nombre de su autor, el gran arquitecto Andrea Palladio que en el siglo XVI proyectó y construyó edificios que todavía hoy suscitan un admirado asombro por su belleza armoniosa, como la Rotonda de Vicenza. En Verona, la ciudad inmortalizada por Shakespeare en su Romeo y Julieta, la cita obligada, es participar en un espectáculo nocturno de ópera en la Arena, un antiguo anfiteatro romano. Sobre la costa noroeste del mar Adriático, entre las desembocaduras de los ríos Piave y Po, se encuentra la ciudad de Venecia, una verdadera joya de la arquitectura italiana.
La ciudad se eleva sobre un conjunto de islas (más de cien) unidas entre sí por alrededor de 800 puentes. A este entramado de islas y canales se accede a través del Puente de la Libertad, en Piazzale Roma.
Los orígenes de Venecia se remontan al siglo V, cuando, desplazados por la invasión de pueblos germanos, algunos habitantes del noreste de Italia se establecieron en las islas. Los venecianos supieron organizarse y darse su propio gobierno. Con el paso de los siglos Venecia se transformó en un importante centro de poder político, militar y económico, alcanzando su mayor esplendor en el siglo XV.
Venecia tiene hoy alrededor de 400.000 habitantes. Es la capital de la región italiana de Véneto. Su área metropolitana (Padua-Venecia) supera el millón y medio de habitantes. La ciudad conserva con celo los testimonios de su riquísima historia y lucha por evitar la degradación de su arquitectura, provocada por la erosión y las inundaciones periódicas.

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